Cementerio de Santiago Apóstolo
La muerte no nos roba a los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente
Los cementerios, desde su fundación, se convirtieron en lugares donde, en recuerdo de los muertos, se levantaban complejos monumentos funerarios en los que se aunaba la arquitectura y las monumentos. El Cementerio de Santiago Apóstolo está en Lugo un lugar que proporciona la paz que se requiere para que las personas de Lugo, puedan recordar a esos seres queridos que por el momento no se encuentran entre nosotros.
Un cementerio para el descanso
Las tumbas, mausoleos y panteones se conceden de esta forma por un periodo de 99 años en la situación de un cementerio público. Es considerable saber que cada cementerio así sea público o privado tiene una reglamentación diferente al respecto, por lo que es recomendable informarse de manera correcta antes de elegir una u otra opción, para eso contacte con Cementerio de Santiago Apóstolo, los datos los puede encontrar más abajo, para ver cuáles son sus reglas al respecto.
El Cementerio de Santiago Apóstolo brinda un completo servicio a las familias por medio de la integración en un mismo espacio de distintas instalaciones.
Datos del Cementerio de Santiago Apóstolo en Lugo
Esta página web se actualiza siempre para sugerir toda la información sobre Cementerio de Santiago Apóstolo, teléfono, dirección, información, web, email. Más tarde, se decretó una ley que prohibía el depósito de restos humanos en las ciudades por motivos de higiene, y empezó la tradición de crear espacios en el campo de manera expresa para este fin.
Prestan una atención personalizada y también ininterrumpida durante las 24 horas del día, todos y cada uno de los días del año, a través de personal altamente preparado, se desplazan al acercamiento de la familia y también reportan de las diferentes configuraciones de servicio de las que disponen, siempre con un trato afable y caluroso, conscientes de lo bien difícil de esos instantes, y de la particular sensibilidad, delicadeza y compresión que se precisa.